Pese a los
estudios realizados, son pocos los datos conocidos sobre Sai Baba de Shirdi.
Hasta hoy no se sabe con exactitud la fecha y lugar de su nacimiento así como
no se tiene ninguna información acerca de sus padres y su familia. Lo único que
se conoce con certeza es el carácter y comportamiento de este hombre que en su
juventud se caracterizó por ser una persona tranquila, justa y, sobre todo,
dotada de una gran paz interior.
Desde su misma
niñez, la importancia de Sai Baba fue creciendo entre sus seguidores, a lo
largo de toda su vida, como un ser dueño de una gran sabiduría que había
alcanzado la Autorrealización y había traspasado el océano de ilusión, ajeno a
las cosas perecederas y a los placeres de este mundo.
Sentado siempre
bajo el árbol de neem, Sai Baba no se mezcló ni habló con la gente que le
rodeaba salvo para responder a sus preguntas o peticiones. Sus ropas eran extremadamente
sencillas. Vestía siempre un simple dhuni para protegerse del frío y un
turbante para cubrir su cabello.
Comportamiento
Sai Baba de
Shirdi trató siempre por igual a ricos y a pobres y su consejo era como un néctar
para todo aquel que le escuchaba, permitiendo que su corazón brillara como el
más limpio de los espejos.
Evitaba las
discusiones y cualquier intento de analizar los pros y contras de una
situación, mostrando en todo momento una gran tranquilidad fruto del
conocimiento de que Dios era su único dueño.
Pese a su
apariencia humana, los hechos de Sai Baba, como algunas de las curaciones que
realizó entre la gente que acudía a él, dan prueba de la conexión que mantenía con
la Divinidad.
Sai Baba de
Shirdi autorizó en vida la escritura del Shri Sai Satcharitra y permitió la
descripción de sus milagros para que sirviera de inspiración a sus devotos. Sus
historias, parábolas y enseñanzas proporcionaban paz y felicidad a la gente afligida
por sus dolores y cargada pesadamente con las miserias de su existencia
cotidiana.
Sus enseñanzas
Sai Baba pensaba
que si los hombres escuchaban sus historias y enseñanzas con respeto, meditaban
sobre ellas y las asimilaban, crecería la fe en sus corazones y aumentaría su
alegría al tiempo que desaparecerían el orgullo y el egoísmo. De ese modo
podrían relajar su mente y conseguir fácilmente la Auto-Realización y la dicha.
Equilibrar su mente y zambullirse en el Amor permitiría a los hombres disfrutar
de una alegría infinita y eterna. Sai Baba de Shirdi procedió a tender un
puente entre hindúes y musulmanes. Rama (Dios de los hindúes) y Rahim (Dios de
los musulmanes) eran uno solo. No había la más mínima diferencia entre ellos. Y
siendo así ¿por qué deberían pelear sus devotos entre ellos? Según sus
enseñanzas, discutir no es bueno, como tampoco querer emular a otros ni tener
siempre en cuenta el interés y bienestar de uno mismo. Dios nos ha de proteger.
El yoga, el sacrificio, la paz de la mente y el conocimiento son, según Sai Baba,
los medios para alcanzar a Dios. Si no lo logramos, el nacimiento es algo
inútil. Y si podemos hacer algo, que sea algo bueno para los demás.
Sai Baba, que
sentía un gran amor por sus discípulos, mostró todas las cualidades de un
verdadero Guru Sus consejos tendían a desarrollar las buenas cualidades en sus
devotos, purificando su corazón y estableciéndolos en el camino de la
salvación. Sai Baba de Shirdi no impartió conocimiento terrenal sino que se fijó
en la naturaleza de los seres humanos, en el sí mismo, intentando conducir a sus
devotos más allá del océano de la existencia. Supo ver la Divinidad en todos
los seres. Consideraba a amigos y enemigos semejantes a Él y se sentía Él mismo
tanto en la prosperidad como en la adversidad, manifestándose así como un ser
desinteresado, libre y perfecto.
Si deseamos o
necesitamos cualquier cosa, tan solo debemos pedírsela al Señor, rindiéndosela
y esperando sus bendiciones. Debemos fijar a la Divinidad en nuestra mente,
entregando sentidos y mente, dedicados siempre a la adoración de Dios y no
permitiendo que nuestra atención se dirija a ninguna otra cosa material como
nuestro cuerpo, nuestra casa o nuestros bienes. Si lo conseguimos, dispondremos
entonces de una mente tranquila, pacífica y despreocupada y conseguiremos salir
del océano de ilusión que nos rodea y juega con nosotros.
El camino a Dios
Cierto día tras
un largo viaje, un buscador se acercó a Sai Baba y le dijo: “¡Oh maestro,
muéstrame el camino a Brahman!”. Y Sai Baba, gratamente sorprendido por su
petición le dijo: “Todos los que acuden a Mí traen peticiones materiales, por
lo que me es muy grato complacer tu petición espiritual. Para alcanzar a Brahman
tienes que tener:
Virakti o sentimiento
de insatisfacción con las cosas de este mundo
Antar muckhata
(introspección). Tener la atención en el interior, no hacia el exterior. Ausencia
de pecado. Dejar de tener comportamientos equivocados.
Comportamiento
correcto. Preferencia por lo bueno (tiene que ver con los asuntos espirituales)
sobre lo agradable (tiene que ver con los asuntos mundanos).
Purificación de
la mente. Abandonar el egoísmo, la avaricia y los deseos mundanos de la mente.
Control de la
mente y los sentidos.
Necesidad de un
Guru. Es absolutamente necesaria la ayuda de un Maestro que tenga la
Autorrealización, dado que ya ha recorrido el camino que tú vas a recorrer. La
Gracia de Dios que es el requisito más importante.
Las enseñanzas
de un Guru no tienen ninguna utilidad para el hombre lleno de egoísmo o que
siempre piensa en los objetos de los sentidos. “Mi tesoro está lleno y puedo
darlo a cualquiera que lo desee, pero tengo que ver si está preparado para recibir
lo que entrego. Si me escuchas cuidadosamente, sin dudas, serás beneficiado. Nunca
digo nada que no sea verdadero”.
Sai Baba de
Shirdi vivió en la más absoluta pobreza pero nunca se apartó del mundo. Fue un
Satguru que, tras alcanzar a Dios, se esforzó por llevar el bienestar a la
gente.