Podemos ubicar históricamente a Raja
Janaka o Rey Sabio Janaka unos 6.000 años antes de Cristo en la India. La denominación de “Rey Sabio” viene
dada porque, en la Antigua India, los Reyes, para poder ser Reyes y estimados por
todo el pueblo y no sólo por los militares, debían de tener un título, aparte
del título de Príncipe, de Rishis (sabios) y llamarse por tanto Raja-Rishis o
Rajarshis, que significa: Rey sabio. Leamos algunas anécdotas para
conocer la historia de este maestro.
Raja Janaka, modelo de Rey sabio
Janaka destaca por su capacidad de
dirigir completamente sus pensamientos hacia lo divino. Mientras cumplía con
sus deberes para con el mundo ordinario, gobernaba su reino y procuraba lo
necesario para sus súbditos.
“Ama las cosas de este mundo con el
amor que debes y no más”.
El gran sabio Suka estaba una vez
enseñando muchas cosas a sus discípulos. Janaka supo de esto y deseó
convertirse en discípulo de Suka y recibir sus enseñanzas. Se dirigió al bosque,
presentó sus respetos a Suka, le pidió que le aceptara como uno de sus numerosos
discípulos, y le solicitó permiso para asistir a sus clases. A partir de ese
día, Janaka se portó como uno de los discípulos. Un día que no llegó a tiempo,
Suka no inició sus clases, esperando a que el Rey llegara. Además de eso, les
dijo a sus discípulos que estaba posponiendo la clase por esa razón. Cuando les
dijo que esperarían hasta que Janaka llegara, ellos empezaron a murmurar entre
sí, y se decían unos a otros que habían buscado a este gran sabio sólo porque
creían que él no concedía importancia especial a los reyes y otras personas poderosas.
Desde aquel día, su fe en el gurú
empezó a declinar y comenzaron a sentir envidia del Rey Janaka. Tan pronto como
Suka percibió tal sentimiento de envidia y celos entre sus discípulos, decidió
darles una lección. En un momento dado hizo creer a todos los alumnos que la
ciudad de Mithilapura estaba en llamas. Todos empezaron a pensar en las
consecuencias, en lo que podría pasar en sus casas, y corrieron a la ciudad
para salvar lo que pudieran. Sin embargo, Janaka no se mostró inquieto ni se
movió de su lugar. Suka le dijo que las llamas parecían haberse extendido hasta
el palacio y lo conminó a que fuera y salvara a sus habitantes. Janaka sólo
sonreía, pensando que la voluntad de Dios se cumpliría y nadie podría
cambiarla. Los envidiosos estudiantes que corrieron hacia la ciudad encontraron
que no había ningún fuego y que aquello había sido sólo un engaño. Regresaron,
informaron de esto a su Gurú y se sorprendieron de la estabilidad mental de
Janaka.
Suka los miró y les dijo que era
mejor tener un solo estudiante disciplinado que muchos que no tenían firmeza de
mente.
Raja Janaka, padre de Shri Sita casada con Shri Rama
El Rey Janaka tenía el arco de Shiva
en su palacio. Ese arco era muy pesado y no era posible que los mortales lo levantaran.
Un día, Sita, que era muy joven en ese momento, estaba jugando a la pelota con
sus compañeros de juegos. Mientras jugaba, sucedió que la pelota quedó atrapada
debajo del arco de Shiva. Todos los niños trataron en vano de levantarlo.
Entonces Sita, como si nada, lo levantó con su mano izquierda y agarró la
pelota. El Rey se quedó asombrado
cuando se enteró del incidente. Se dio cuenta de que Sita no era una niña
ordinaria. Decidió darla en matrimonio a una persona que pudiera romper el arco
de Shiva. Pensó que sólo una persona así sería la pareja adecuada para ella, ya
que ningún mortal podía hacerlo. Habiendo decidido esto, envió invitaciones a muchos
reyes. El día fijado, los reyes vinieron e hicieron fútiles intentos de
levantar el arco. Hasta el poderoso Ravana fracasó miserablemente en su intento
de levantar el arco.
El sabio Vishvamitra había traído a
Rama y a Lakshmana con él a la corte de Janaka. Todos los que estaban allí
reunidos se sintieron atraídos por sus radiantes formas. Nadie miraba el arco.
Su atención estaba centrada en Rama y Lakshmana. Vishvamitra le echó una mirada
significativa a Rama. Rama comprendió su implicación y lentamente empezó a
caminar hacia el arco. Todos los reunidos sonreían para sí pensando cómo podría
un muchacho tan joven realizar una tarea en la que hasta el poderoso Ravana
había fracasado. Para asombro de todos, Rama levantó el arco sin esfuerzo con
su mano izquierda. Janaka recordó el incidente de cuando Sita levantó el arco. Se
llenó de alegría con el sentimiento de que había encontrado al marido adecuado para
Sita. Mientras tanto, Rama trató de templar el arco. En el proceso, se rompió
con un sonido atronador. La gente quedó impresionada viendo la majestuosa forma
de Rama y su poderosa proeza. Aclamaron la buena fortuna de Sita con profusión.
Estaban felices de que Sita hubiera ganado la mano de una persona que era
virtuosa, poderosa y hermosa.
Raja Janaka, en busca del conocimiento interior
Ver Ramayana
Raja Janaka, en busca del conocimiento interior
Durante su reinado, Raja Janaka
envió un mensaje a todo su pueblo por el que solicitaba un maestro que le
enseñara su propio conocimiento interior. Astavakra se presentó como aquel que
podría resolver el problema del Rey diciéndole: “Mi Rey, yo estoy preparado
para transmitirte el conocimiento del Atma como tu deseas, pero para ello debemos
alejarnos de la corte y trasladarnos al bosque”.
Y así lo hicieron. Una vez allí,
Astavakra habló a su rey: “No estoy seguro de continuar si tú no aceptas mis condiciones.
Yo solamente soy un chico en posición de maestro. Y tú eres mi todopoderoso Rey
en posición de discípulo. ¿Estás preparado para aceptar esta relación? Si estas
de acuerdo en aceptar esta relación yo seré tu Guru y comenzaremos mis enseñanzas.
“El Rey Janaka contestó a Astavakra:
“alcanzar a Dios es lo más importante para mí y estoy preparado para darte absolutamente
cualquier cosa que tú quieras”. Astavakra replicó: “yo no quiero cosas
materiales, todo lo que deseo es tu mente. Debes darme tu mente”. El Rey
contestó: “yo te daré mi mente “.
Astavakra pidió a su Rey que se
sentara bajo un árbol y se alejó. Los soldados que custodiaban al Rey, y que se
encontraban fuera del bosque, esperaron durante mucho tiempo hasta que
comenzaron su búsqueda. Cuando le encontraron, su Rey no contestaba a sus
preguntas; de hecho, parecía no escucharles, por lo que, asustados, llamaron al
Primer Ministro.
El Primer Ministro tampoco consiguió
que el Rey contestara a sus preguntas, por lo que avisó a la Reina, a la que
tampoco respondió.
Finalmente, los soldados trajeron a
Astavakra ante la presencia de su Rey, creyendo que le había hechizado. Astavakra
les preguntó: “¿por qué estáis preocupados? El Rey está a salvo y en paz”.
Al oír la voz de Astavakra, el Rey
abrió los ojos y preguntó a su maestro por la paz que había sentido. Astavakra respondió:
“Tú has alcanzado el estado de la Realización con Dios”.
Raja Janaka, transmisor de los conocimientos
a todo el pueblo
Janaka transmitió el principio del
conocimiento de los valores de los guerreros, más allá incluso de la propia
estirpe de los guerreros. Introdujo en los monasterios las enseñanzas de las
gimnasias energéticas, que aun cuando eran enseñadas por los Maestros monjes,
solamente eran aprendidas inicialmente por los que iban a ser guerreros, y posteriormente,
con Janaka, por todo el pueblo. Impulsó a los médicos, para que sacaran de las
estructuras de las técnicas militares, que fortalecían el cuerpo de los
guerreros, los conocimientos precisos para ayudar a la gente a mantener su
salud y, al mismo tiempo, para que los novicios pudieran no solamente elevar su
espíritu sino, al mismo tiempo, tener unos cuerpos sanos y fuertes que les
permitieran continuar con la mística y sus diferentes trabajos.